Si hay siesta no hay peligro
Si hay siesta no hay peligro
Si no hay depredadores, no hay alarma.
Y sin alarma, entonces, no debemos estar preparados para la intempestiva huida.
Podemos quedarnos ahí, tranquilos, descansando. Total, si ninguno de nosotros es depredador podemos estar durmiendo la siesta juntos. Sin sospechar, sin medir, sin calcular. Solo estar.
Magui Trucco pinta amorosamente lugares donde cerrar los ojos, olvidarse del mundo y echarse una siesta no es un peligro. Donde bajo un árbol, se puede desconectar de todos los mecanismos que nos mantienen en constante tensión, con los sentidos despiertos.
Un territorio sin depredadores. Una forma nueva de relacionarnos.
Sebastián Fuks, 2021