Decir que
Decir que la idealización es una ilusión que inevitablemente lleva a la decepción puede sonar pesimista. Pero la chispa de la desilusión tiene la capacidad de ser un motor, el campo fértil donde sembrar nuevas maneras de habitar y relacionarse. Si impera el caos y la destrucción, si no hay arriba ni abajo es posible que el compromiso con la creación sea obligatorio. Lo anterior no funcionó, borrón y cuenta nueva, hay una oportunidad en la ruina.
Magdalena Trucco construye un Arca de Pintura para navegar el Mar del Desengaño. En ella se reúnen las especies para inventar un mundo mejor de luz y color. Es un refugio donde resguardarse, allí podemos reencontrarnos y sentir a través del color, aprender de la observación, ejercitar la mirada que acaricia y cuida.
La pintura acompaña, enseña y resguarda a la artista. Desde ahí anhela la posibilidad de inventar comunidades que sean vitales, en las que haya una conexión real con nosotros mismos, con los demás y con la red de la vida. Una pintura donde la vida florezca: la ecológica, la comunitaria y la personal.
Almendra Cohen 2024